En aquella hora dormida, temblorosa y estatua

jueves, diciembre 17, 2015

Hay quien arriesga; y yo arriesgué por ti mi vida; puse en peligro, por amor y buscarte, ese lugar oculto donde mi corazón gravita. En aquella hora dormida, temblorosa y estatua, donde tú me aguardas. Tú, en tu cuerpo, exclusiva esmeralda, escogida entre mis privilegios, amaba.

You Might Also Like

0 comments

Compartir en Instagram

Popular Posts

Like us on Facebook