Bombilla y gato ausentes
miércoles, agosto 15, 2018
Con-vencida y mareada, sin pensar yo como siempre ausente, conociendo del río el fondo, ni nadamos, ni nos ahogamos de amor, de penas a veces. Había una esquina en nuestra historia, esquina redonda por usada, bastante oscura, de eso yo al volver por el camino de la bombilla me encargaba. Estaba también ese gato, sucio, hambriento de raspa seca por la delgadez se veía, que andaba ya con poca fuerza en sus silenciosas patas, quedaba su vientre de lado a lado pegado, por el pequeño alfiler de acero que en mi mente lo sujetaba.
0 comments