le tocó a mi pie

domingo, octubre 31, 2010


Me exploraste por pequeñas partes; como haciendo reconocimiento exhaustivo. Esa noche le tocó a mi pie. Lo cogiste como se tiene en la mano a un objeto precioso, frágil, rompible. Me sorprendí. Pusiste mi talón en el cuenco de tu mano templada. Noté tu pulso suave, lento, reflexivo. Lo mirabas como si nunca hubieses visto un pie femenino. No me lo creí. Tampoco quise estropear tu estado con una sonrisa. Me la callé. Aunque si hubieses mirado en ese momento mis ojos me delataban. Pusiste la otra mano abierta bajo mis dedos. No me gustaban mis dedos; pero a ti te gustaron. No se qué se puede mirar en unos dedos. Pero tu mirabas. Pasaste el dedo gordo sobre mis dedos; como buscando algo. Enlazaste tus dedos con los míos como hacen dos manos. Y así te quedaste. Luego, pusiste palma de la mano contra la planta de mi pie; bajo esa curva. Te quedaste ahí. Me hiciste olvidar los amores torpes. Acabo de olvidar hasta sus manos.

You Might Also Like

0 comments

Compartir en Instagram

Popular Posts

Like us on Facebook

Flickr Images