y había luces en esta vida y se acordaron de ti, ¿dónde estabas? ¿me habías abandonado como se abandonan las dimensiones de la paz? no; era una de tus estratagemas, para perdernos caías sobre el pasado, insaciable, yo maldecía enardecido mi propia cólera, me retorcía en la convulsión del suelo, las pupilas se me agrandaban con solo verte, inmóvil, mi boca parecía envenenada,...