Por las grietas de las paredes gotea el dolor. Entre esos paréntesis grita con sus labios de cemento. Desprende un pestilente olor a carne que se pudre en el calor de la carne de dentro. Huele a su intolerable miedo. Sombras de miedo. Ya se desgastó la distancia. Aprendió a llorar. Como si hubiese inventado las lágrimas. Inventó un pasado corto para tratar de...