Sabemos tan poco tan confuso que creen en el altar numérico para movimientos espasmódicos incontrolables en Plymouth, Devon, Inglaterra, el martes bordeaba al norte cada vez que llegaba el círculo a cerrarse sobre sí mismo, los que habían salido de Plymouth hace muchos años cerca de las montañas de Sierra Nevada, California muestra lo difícil que es estar seguro de lo que le sucedió exploraban constantemente el espacio "insomníaco" había varios Lacértidos en ese terreno escarpado que intentaban escapar de su propio pánico mordiéndose la propia cola especularmente con el otro mismo de su propia carne aunque el cuerpo del cuerpo no se desprende ni debe apagar su presencia primaria fuente del mutuo sentimiento del bienestar primario para volver llenar a sí mismo bajo la ferviente lógica de la  reforma empirista protestante del afecto primario del amor confundiendo siempre el amor con la necesidad, sentimiento humano con la necesidad del cuerpo.

By Carlos del Puente